La competencia en el mundo de la tecnología es feroz y no permite errores, como ha demostrado Samsung al aprovechar una controversia generada por Apple.
El último anuncio del iPad Pro de Apple, que muestra objetos culturales aplastados por una prensa hidráulica para destacar la delgadez del dispositivo, ha causado reacciones negativas, especialmente entre la comunidad creativa.
Apple presentó su nuevo iPad Pro con el eslogan: “Hoy no sólo vamos a impulsar los límites de lo que puedes hacer con un iPad. Vamos a aplastarlo”, acompañado de un video donde diversos objetos como: instrumentos musicales, lentes fotográficos, obras de arte, libros y fotografías son aplastados, sugiriendo que pueden ser reemplazados por el iPad.
La comunidad creativa ha visto el anuncio como un desprecio hacia las herramientas tradicionales de creación artística, lo que ha generado una ola de críticas. En Japón, donde el respeto por las cosas materiales es profundo, el anuncio ha sido especialmente impactante. Tal pareciera que Apple no visualizo la sensibilidad del tema, especialmente en tiempos donde la IA y las nuevas tecnologías son vistas como amenazas para ciertas profesiones artísticas.
Samsung respondió rápidamente con un anuncio que utiliza el mismo escenario, pero reivindica el valor de las herramientas tradicionales. En el anuncio de Samsung un artista entra a escena y rescata un instrumento que previamente se intento destruir, se sienta en la plancha en la cual se destrozaron los objetos y comienza a tocar unas notas musicales las cuales puede leer desde su Tablet Samsung, misma que se encuentra sobre un caballete.
El anuncio de Apple llega en un momento delicado, con la inteligencia artificial generativa generando ansiedad en el mundo artístico. Samsung ha aprovechado esta situación para presentarse como una marca que respeta las herramientas tradicionales mientras abraza la tecnología. La respuesta de Samsung ha sido aplaudida por su ingenio y sensibilidad, mientras Apple enfrenta críticas.
Esta controversia destaca la importancia de la percepción pública y la sensibilidad cultural en el marketing, sin duda alguna este caso deja al descubierto que la llegada de la IA y el posible remplazo humano aún es un tema sensible y delicado para la sociedad.